La pedagogía de la conciencia fue por primera vez, al menos en Latinoamérica, expuesta en 2004, en la obra “Aristeia: Hacia una nueva pedagogía de la conciencia?” del autor que lidera este diplomado.

En dicha obra se plantea, como un modelo de anticipación, la pedagogía iluminada por la sabiduría perenne de la antigüedad, esto es, en la exploración provocativa de saberes e ignorancias acerca de la naturaleza esencial humana, de la conciencia que reconoce su experiencia y de los rasgos históricos de la evolución de la humanidad. 

Además, esa obra encierra las preguntas que dan origen a la Epistemología Espiritual y a la Poli(É)tika, que constituyen otros aportes más recientes del mismo autor.

El primer objetivo de este Diplomado es contribuir a la formación o perfeccionamiento de educadores, en lo que significa y provoca la investigación de la naturaleza esencial humana y, especialmente, la consideración de la conciencia, como “magna anomalía científica”, en las experiencias humanas vinculadas con la educación y sus aspectos clásicos de paideia y  technê.

El segundo objetivo es ampliar la visión más allá de los fines de la escolarización formal, hacia el auténtico sentido del educar, ligado al despliegue de las facultades pre cognitivas, espirituales y sociales, en íntima conexión con el posible sentido de la vida humana y del Universo. 

Y el tercer objetivo es explorar ciertas  convergencias y divergencias entre la ciencia, especialmente la biología molecular, la neurología infantil y adolescente, la filosofía perenne y sus vías de acceso al conocimiento, manteniendo atención sobre las prácticas pedagógicas sugeridas en estos estudios.

Esperamos que los docentes y estudiantes de pedagogía logren experiencias conscientes de su vida y vocación, para descubrir y reconocer las propias de sus estudiantes, más allá de las dimensiones físicas, emocionales y mentales.

En ese camino, el Diplomado les acercará reflexiones, conocimientos, incertidumbres, metodologías, instrumentos, metódicas didácticas, de múltiples fuentes de la antigüedad y de nuestro tiempo, para la práctica de la Pedagogía de la Conciencia, en la que confiaremos un acercamiento educativo al Bien individual tanto como el Bien Común y Social.